Fueron 303 discursos en un año. Ayer la Presidenta se despidió de la actividad oficial de 2009 con dos mensajes públicos que, más allá de sus temáticas específicas, dejaron una noticia que, en realidad, ya dejó de ser noticia: Cristina Fernández se quejó de los medios.
En el acto de apertura de los sobres de licitación para la producción de vacunas contra la gripe A (H1N1), la jefa de Estado aprovechó para denunciar una “campaña” de quienes supuestamente pretenden “instalar el desánimo en los argentinos con la idea de que las cosas nos van mal y de que nada nos sale bien”. Sin dar nombres, criticó a los “aprendices y divulgadores de cataclismos” y les pidió “abandonar la esquizofrenia como política comunicacional”. La Presidenta señaló que “lo que pasa y lo que cuentan que pasa son dos cosas diferentes” y reclamó que los medios informen sobre el Hospital de Niños Garrahan, el que aseguró que “no tiene nada que envidiarle a países desarrollados”. También sugirió como noticia publicar que “este año la industria farmacéutica exportó más que el anterior”. No hizo referencia, en cambio, a las noticias sobre las mafias de los medicamentos, que involucra a algunos de sus aliados políticos y a aportantes a su campaña presidencial. El otro discurso del día lo pronunció en la firma de un convenio de cooperación con cuatro provincias (Salta, Mendoza, Buenos Aires y Tierra del Fuego) para brindar cobertura médica a los presos. El acuerdo fue firmado en el Salón Científicos de la Casa de Gobierno.
Fuente : critica