La petrolera YPF incrementó desde ayer el precio de algunas naftas y del diésel que produce y comercializa en Capital Federal y alrededores. Así sigue los pasos de sus competidores que desde el primer día del año hicieron lo mismo. El justificativo para la firma de capitales nacionales y españoles es el aumento en los costos por la ley que exige un 5% de biocombustible en cada litro de nafta y que comenzó a regir a partir de este año. Desde el Gobierno respondieron que la normativa no debería modificar los valores.
YPF, que detenta la primera posición en el mercado local en cuanto al volumen de ventas, aumentó 1,8 centavos por litro sus naftas común y súper, de manera uniforme en todo el país, y 2% el diesel (de $ 2,658 a $ 2,708) en Capital y alrededores. La línea premium no subió.
La nafta súper de YPF pasó a costar en Capital Federal 3,127 pesos por litro, contra 3,109 vigente hasta el sábado último.
En estaciones de servicio del Gran Buenos Aires, el mismo combustible pasó de 3,239 pesos a 3,257 pesos el litro.
La nafta común o normal aumentó también 1,8 centavos y en Capital pasó de 2,394 a 2,412 pesos el litro, mientras que en el Gran Buenos Aires pasó de 2,593 a 2,611 pesos.
El combustible ultradiesel aumentó sólo en Capital y el Gran Buenos Aires, y pasó de 2,658 a 2,708 pesos por litro. Se trata de valores de referencia para estaciones propias. Las tercerizadas suelen aplicar aumentos adicionales.
YPF era la única petrolera que no había ajustado sus precios en los últimos días. El 30 de diciembre, Esso aumentó entre 4 y 7 centavos sus naftas, y Shell llevó la súper de $ 3,210 a $ 3,249 y el diesel V-Power de $ 3,565 a $ 3,609 en Capital y alrededores. Esta alza se debió a un nuevo precio de referencia del barril de crudo que las refinadoras pagan a las productoras, que pasó de u$s 42 a u$s 46 por el aumento del valor internacional. En Petrobras mantuvieron silencio con respecto a las variaciones de precios.
YPF, que explora, produce y refina, justificó la suba en la vigencia a partir de este año de la ley 26.093 sancionada en 2006 que fija un 5% de componente de biocombustible por cada litro que se expende. Adujo un costo extra por las modificaciones en la refinación. Fuentes de la Secretaría de Energía dijeron que no es razón para aumentar. “Es sólo una estación de mezcla”, afirmó una fuente oficial. En Shell abrieron el paraguas para más aumentos. “Todo costo extra derivado de la incorporación de biocombustibles a nuestras naftas y gasoils es y será trasladado al precio de surtidor”, dijeron en la firma.
Nuevo ducto para gas boliviano
El ministro de Planificación, Julio De Vido, oficializó la construcción de la extensión del gasoducto Integración, que aportará gas desde Bolivia a los principales ductos del país. La cartera anunció que en los próximos meses “se pondrá en marcha la construcción del Gasoducto de Integración que, con una extensión de 70 kilómetros, posibilitará incrementar el volumen de transporte de gas natural originado en Bolivia”. Una porción de ese fluido abastecerá el proyectado Gasoducto del Noreste (GNEA), en tanto que otra parte del nuevo gas boliviano pasará a incrementar el volumen transportado por el sistema del noroeste a cargo de TGN.
Fuente : Critica