Tras el atentado estallaron más hechos de violencia, cuando chiíes indignados hicieron disparos al aire y tiraron piedras a las fuerzas de seguridad que habían vigilado la procesión, acusándolas de no hacer nada para prevenir el ataque.
Los manifestantes incendiaron un mercado, otros dos inmuebles y varios vehículos, destruyendo tiendas, mientras otros intentaban detenerlos. Las fuerzas policiales y paramilitares hicieron disparos al aire para dispersar a la multitud.
La explosión mató a 30 personas e hirió a 60, informó Sagheer Ahmad, ministro de Salud de la provincia de Sindh, de la cual Karachi es la capital.
Se trató del hecho más reciente de violencia en Pakistán desde que el gobierno comenzó a combatir a milicianos islamistas aliados con Al Qaeda y con el Talibán. Los atentados terroristas han dejado medio millar de muertos desde octubre.
En Karachi prácticamente no se habían registrado ataques atribuidos al Talibán que afectaron a buena parte del país, pero en la ciudad ocurrieron hechos frecuentes de violencia con motivos sectarios, étnicos y políticos.
Los extremistas de la mayoría suní consideran herejes a los chiíes y ambos grupos se han involucrado en una serie de asesinatos y represalias en Pakistán. El ministro del Interior, Rehman Malik, dijo que el atacante suicida detonó sus explosivos al inicio de la procesión.
La marcha era el cumplimiento del Ashura, el décimo día del mes sagrado musulmán de Muharram, que conmemora la muerte del nieto del profeta Mahoma ocurrida en el siglo VII.
Por otra parte, la policía informó que la cifra de muertos tras un atentado suicida contra una reunión de musulmanes chiítas en la capital de la región de Cachemira controlada por Pakistán aumentó a ocho personas. El atentado fue lanzado contra la minoría chií que celebraba el Ashura.
Al menos otras 80 personas sufrieron heridas por el atentado suicida con explosivos en Muzaffarabad, un ataque sectario poco común, pues la zona no tenía mucho historial de atentados de extremistas, consideró la policía regional.
Entre los muertos había tres policías, informó el agente policial Yasin Baig, quien agregó que otros 10 policías sufrieron heridas.