Acompañado por gobernadores provinciales el Presidente de la Nación espetó: ” Vine acá para terminar con los odiadores seriales”, ello en línea con un aberrante proyecto de ley, que de prosperar, consagrará un significativo retroceso en materia de libertad de expresión. Por Guillermo Tiscornia
Traducido a lenguaje claro; ” voy a censurar a quien se atreva a criticar al gobierno”, así de simple
Se recuerda como el ex Presidente Alfonsín a su turno se encargó de censurar a Mariano Grondona y Bernardo Neustadt avasallando la libertad de expresión cuando ordenó directamente levantar del aire el programa “Tiempo Nuevo”.
O cuando además censuró a la animadora Mirtha Legrand en aquellos años ochenta; ni que hablar cuando so pretexto de un inexistente y pretextado cuadro de situación de ” conmoción interior” decretó un controversial “estado de sitio”, a partir del cual ordenó la detención del doctor Rosendo Fraga y del periodista Manfred Schoenfeld ( ” El Informador Público”); entonces no debería sorprender este reiterado avance de gobiernos constitucionales sobre la libertad de expresión.
La Corte Federal Argentina ha establecido: “ que este Tribunal tiene resuelto con relación a la libertad de expresión que las críticas al ejercicio de la función pública no pueden ser sancionadas aun cuando estén concebidas en términos cáusticos, vehementes, hirientes, excesivamente duros o irritantes (Fallos: 308:789). Dicho criterio responde al prioritario valor constitucional que busca resguardar el más amplio debate respecto de las cuestiones que involucran a personalidades públicas o materias de interés público, como garantía esencial del sistema republicano” .
Este mismo estándar se reafirma en la jurisprudencia de la instancia internacional ( CIDH, “Kimel”, “Verbitsky”, “Fontevecchia”, “ D´Amico”).
Saludo al señor director muy atte.
Guillermo J. Tiscornia
Ex juez en lo Penal Económico
DNI 11.371.779