En tanto, con evidentes dificultades en la involución de sus ‘modelos’, tanto Cristina Fernández de Kirchner como Nicolás Maduro (¿Hugo Chávez Frías?) preparan anuncios.
De confirmarse la anticipación de los comicios presidenciales en Venezuela, y considerando que la Argentina enfrentará una renovación legislativa muy importante, aparece en el electoral 2013 otra similitud en la coyuntura de ambos gobiernos. La coyuntura negativa de la economía complica los comicios tanto a una como a otro.
El Palacio de Hacienda argentino elabora un plan para recuperar el consumo doméstico, que evidencia o un amesetamiento o una declinación, tendencia preocupante para un sistema de recaudación de impuestos construido sobre los tributos al consumo.
En tanto en el Ministerio de Economía del Poder Popular venezolano intenta sobrellevar el impacto de la reciente megadevaluación del bolívar, mientras trabajan en una reforma fiscal que le permita enfrentar con posibilidades de éxito el período electoral que comienza a identificarse en el horizonte del Partido Socialista Unido de Venezuela, consecuencia del mal oncológico que padece su líder, Hugo Chávez Frías.
Las economías de la Argentina y Venezuela se encuentran construídas sobre enfoques similares, y padecen los procesos inflacionarios más elevados del continente.
De confirmarse la anticipación de los comicios presidenciales en Venezuela, y considerando que la Argentina enfrentará una renovación legislativa muy importante, aparece en el electoral 2013 otra similitud en la coyuntura de ambos gobiernos. La coyuntura negativa de la economía complica los comicios tanto a Cristina Fernández de Kirchner como a Nicolás Maduro Moros.
El caso argentino
Según adelantaron fuentes gubernamentales a la corresponsalía porteña del diario Río Negro, de General Roca, la presidenta Cristina Fernández de Kirchner realizaría anuncios en el transcurso de los próximos días, consecuencia de la magra realidad de los números de las vacaciones de verano.
Un funcionario asesor del Ministerio de Economía lo admitió: “Los niveles de actividad y de consumo que tenemos son más bajos de lo que se preveía. El verano no fue lo que esperábamos”.
“(…) Gran parte de estas determinaciones tendrán un costo fiscal, aunque en el Gobierno relativizan esa circunstancia, al considerar que este año las cuentas públicas dan un mayor margen de maniobra.
(…) • Precios. Si bien aún no está totalmente determinado, se especula con la posibilidad de renovar por otros 60 días el acuerdo de precios, con la autorización de incrementos pactados con el Estado en determinados rubros. Además, se quiere impulsar una norma de precios máximos, con el fin de tener una herramienta jurídica más contundente a la hora de controlar los valores de los productos. Esto incluso se lograría modificando el artículo aún vigente de la ley de Abastecimiento. En este punto –como ya adelantó “Río Negro”– se extendería el acuerdo de precios a todos los mercados y se amenazará con represalias a quienes no lo cumplan. El secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno, ha proferido la amenaza de represalias frente a los incumplimientos, que no descartan expropiaciones de empresas. Análogamente, se evalúa reproducir en el interior del país esquemas como el del Mercado Central, de uso masivo y precios ostensiblemente menores, como ocurre en algunas regiones del país. El objetivo es siempre el mismo: contener la inflación. La ofensiva de Moreno incluiría a las entidades de defensa del consumidor, con la amenaza de que se las suspenda del Registro Nacional de Asociaciones de Consumidores.
• Impulso al consumo. Se ampliaría el actual régimen, recientemente renovado, de reintegros de IVA a los consumos con tarjetas de débito y de crédito. Se aplicaría un incremento de dos a tres puntos en esas devoluciones.
pagebreak ]
• Tipo de cambio. Se va a continuar con la prohibición del ahorro en dólares, aunque cada vez circula con más fuerza el rumor de un desdoblamiento cambiario, con un tipo de cambio financiero y otro comercial. En el Gobierno circula la idea de llevar el dólar oficial a 6 pesos hacia fin de año, aunque se considera que el deslizamiento debe ser paulatino. Para el día de las elecciones podría estar en 5,40 pesos. “Ello permitiría más competitividad y producción de bienes y quitar presión de la demanda”, dicen en desde de la cumbre de las decisiones. La idea de una devaluación paulatina podría mejorar la recaudación por exportaciones y la caja, piensan en Balcarce 50.
• Asignaciones. Aumentaría la asignación universal por hijo en un nivel del siete al ocho por ciento.
• Promoción de inversiones. Se incrementaría el subsidio de las tasas de interés para la financiación en la compra de bienes de capital de diversos sectores industriales.
• Créditos. Se incrementarían las actuales líneas de créditos con tasas subsidiadas para las pequeñas y medianas empresas. Se aplicarían condiciones más flexibles en las condiciones de crédito. Por otra parte, el gobierno prorrogaría todo el año los créditos a la industria, a baja tasa, otorgados con el 5% de los depósitos de los bancos.
• Importaciones. Se busca instrumentar mayor flexibilidad en el férreo régimen de control de importaciones. Habría más apertura para la importación de maquinaria, bienes intermedios y determinados bienes de consumo masivo.
• Estatizaciones. Está en evaluación la nacionalización de empresas privatizadas del sector energético, “para fortalecer la épica de la soberanía energética en contraste con los cortes de luz frecuentes en el verano “. La alternativa es buscar anuncios de algún logro con la estatizada YPF.
• Emisión. Todo indica que la emisión monetaria y el fuerte gasto público continuarán con la misma intensidad que ahora, ya que en el convencimiento oficial se descree que esas acciones sean las culpables de la inflación.”
El caso venezolano
Con la firma de Rosa Andreína García, publicó El Informador, de Nueva Segovia de Barquisimeto, capital del Estado Lara:
“El Ejecutivo impulsará, con el apoyo de la Asamblea Nacional, una “reforma fiscal como parte de un conjunto de nuevas medidas como parte de una nueva etapa del gobierno del presidente Hugo Chávez”, indicó, a medios de comunicación nacionales, el diputado psuvista Ricardo Sanguino, presidente de la Comisión de Finanzas.
Sobre el tema, Elías Bessis, presidente de Fedecámaras-estado de Lara, explica que cuando se devalúa la moneda, necesariamente la decisión debe venir acompañada de medidas que ayuden a la economía venezolana y que a su vez permitan que el salario no se diluya, “que es lo que está pasando con el dinero en la actualidad”.
Agrega que “el dinero se ha ido más en ayudas sociales, que en vez de ir orientadas con políticas de desarrollo y crecimiento, son medidas populistas”.
Entretanto, Isidro Mendoza, vocero del Consejo de Entes Productivos para el Desarrollo Económico de Lara, dijo que “la reforma fiscal” es una medida complementaria a la devaluación del bolívar, “y va orientada a que el que gane más pague más”, al tiempo, que dijo que ampliará la base económicamente activa que cancela o va a cancelar impuestos, ya sean profesionales y técnicos o de libre ejercicio para que declaren y paguen ISLR (Impuesto Sobre la Renta).
Mendoza manifiesta que al Ejecutivo Nacional le tocará modificar la tabla de cálculos para estimaciones de ganancias. Además agrega que con esta reforma el Seniat debe ampliar sus funciones de control p
ara evitar la evasión de impuestos, y así aumentar la cantidad de impuestos que van a alimentar el fisco. “Estas deben ser medidas de vigilancia y control de empresas importaciones y que se hagan las revisiones respectivas”.
Sobre la eliminación del Sitme (Sistema de Transacciones con Títulos en Moneda Extranjera), el representante del los Entes Productivos considera que se debe crear un nuevo para la adquisición de divisas para las empresas que no están en las lista uno ni dos de la Cámara de Administración de Divisas (Cadivi), pues aunque no hagan actividades prioritarias, si son necesarias en muchos casos para suplir algunos insumos.”
fuente urgente24